sábado, 12 de diciembre de 2015

Unas elecciones medio frívolas


Imagine que fuese a hacerse una casa o cualquier obra ¿elegiría al constructor más "ilusionante", al más fresco y nuevo? Es obvio que no, esa no sería la elección mayoritaria. ¿Cómo se explica entonces que para gestionar el país entero elijamos con esa ligereza?

Es claro que es posible porque hay una distancia entre la elección y sus consecuencias que nos relaja y porque la complejidad nos supera. Pero eso explica qué pueda ocurrir, no por qué ocurre.




Para el por qué hay que mirar a los medios. También a los políticos, claro, pero menos ya que la función de los medios es informar, analizar y opinar. Que entre los políticos se cuele el charlatán es ley de vida, desmontarlo públicamente es parte de la función de la prensa.

El problema aparece cuando los medios dejan de lado su función para tomar partido de forma tan abierta que más parecen intentar dirigir que controlar.
"La mediocracia".

Cuando frívolamente lanzan a partidos sin contenido como Podemos o Ciudadanos, equiparándolos a partidos con una gestión que valorar como PP, PSOE, IU o UPyD. Equiparando partidos imagen con partidos gestión.
"El origen de los emergentes"

Cuando hasta los pocos datos contrastables son presentados como opinión sin desenmascarar a quienes los falseen. ¿Cómo pudimos elegir en 2008 a un partido que negaba la existencia de la crisis? Los datos se pueden elegir y presentar pero no son opiniones. Es función de la prensa desenmascarar a quien engaña en los datos esenciales.
"Datos de empleo... ¿cero grados, ni frío ni calor?"

Cuando se intenta sustituir la valoración de la gestión y presentación de los partidos y candidatos por concursos de imagen y habilidades dialécticas.
"Debate ¿a florete o a espada?"






Quizá en España haya cosas que regenerar en la clase política. A mi modo de ver básicamente las relacionadas con el límite de mandatos, el multiculturalismo y las ideologías "anti" ("Europa: Dos errores y una carencia"). Pero me da que también habría algo que arreglar en los medios de comunicación para que realicen más su función de control y menos la de la abierta influencia. Un tema a pensarse (yo al menos no lo tengo claro) 






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nota 1: Un par de ejemplos ilustrativos.

 Pedro J. para el problema de los periodistas que quieren detentar el poder de los políticos, dirigir ellos.  "Pedro J.: Guerra de distorsiones"
O a la inversa Zapatero con su manejo de Prisa y Mediapro como ejemplo de político queriendo dominar al prensa (probablemente empezó sufriendo la presión de Prisa pero al final era claro el intento de Zapatero de tener prensa propia)
 

 nota 2: (16 Dic 2015) Tras el debate Rajoy-Sánchez. 
La cuestión no es si se fue agrio, agresivo, un "y tú más", irrespetuoso, romo...

Lo malo es que fue un Solbes-Pizarro segunda parte. El triunfo de una realidad paralela. Demagogia world:
Zapatero nos libró del rescate, pero luego Rajoy nos metió en él y robó el dinero de los pensionistas para dárselo a los bancos, los ricos y la gente de su partido como Rato o Granados… por eso basta con dar marcha atrás a lo hecho.

Bufff… da escalofríos.

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