Susana Díaz. El discurso de la reina

Vaya por delante que yo pienso que Susana Díaz le viene bien al PSOE, que le estabilizará impidiendo que siga estrategias autodestructivas. Y también que a España le viene bien que el PSOE no se líe la manta a la cabeza como ha hecho CiU en Cataluña, dando pie a una clase política radicalizada y alejada del sentido de la realidad.
"Sánchez ¿Bailando un Artur Mas?" 

Pero es no significa que me guste el discurso de Susana Díaz, que parece sostenerse sobre dos patas:


Una pata constructiva, apoyando la unidad de España. Lo que en la práctica ayuda a frenar una estrategia nacionalista perjudicial para la sociedad. Chapeau.
"Nacionalismo y multiculturalismo. Por qué es perjudicial."
  


Pero tiene otra segunda pata destructiva, la anti-PP. 
Probablemente sea tan solo consecuencia de la necesidad de diferenciarse ya que luego no la aplican, pero esto no quita que sea perjudicial. Es un discurso que rechaza globalmente al PP y en particular su estrategia económica. 

Un rechazo que dados los resultados económicos de la última legislatura obliga a hacer demagogia engañosa 
"Datos de empleo... ¿cero grados, ni frío ni calor?"

Se acerca peligrosamente a una ideología emocional, a una forma de justicialismo. De hecho creo que Podemos ha tenido su hueco porque la sociedad española lleva años recibiendo propaganda en este sentido.
"Los enemigos emocionales de la democracia" 

Y en general es autodestructiva e irresponsable ya que acaba denostando las medidas que llevan a la prosperidad (irresponsable) y que ellos mismos aplicarán cuando lleguen a gobernar (autodestructiva). Me recuerda al discurso anti-EEUU desplegado durante décadas en Europa y que acaba siendo anti Occidental. Así como el discurso anti-EEUU dificulta la autoestima de la propia Europa, el discurso anti-PP es igualmente irresponsable y erosiona la autoestima de toda la sociedad 
"EEUUropa, tiempos de responsabilidad y autoestima"





Por resumir. El PSOE ha tenido dos errores graves en su discurso tradicional. Uno la validación del nacionalismo y otro el rechazo de la economía de mercado.
Viéndose obligado a funcionar con un discurso que luego no correspondía con sus actos (perjudicando su credibilidad). Y a unos actos muchas veces contradictorios (perjudicando su eficacia)
Susana Díaz parece querer corregir uno de ellos.
A veces pienso que todo hubiese sido mejor si Bono hubiese ganado aquel congreso en el que Zapatero resultó elegido.

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Nota 1: (29 Dic 2015) Se habla últimamente de aceptar reformas constitucionales y en la ley electoral como posibles contrapartidas a los apoyos para formar gobierno.Aparte de que me parezca impresionante que se pueda modificar algo tan estructural en función de intereses partidistas cortoplacistas ("Oda al bipartidismo y a las mayorías absolutas"), hay una reforma que me gustaría recordar.

El límite de mandatos es saludable, hubiese impedido muchos de los problemas que hemos padecido, sería innovador en Europa y, desde un punto de vista partidista a corto... garantizaría un escenario muy abierto para las siguientes elecciones si esta vez repitiese Rajoy.
"Límite de mandatos, ya"

Y en general: doble vuelta, límite de mandatos, añadir un número de escaños (¿60?) de ámbito nacional... ¿Se buscará mejorar el sistema o atender a intereses partidistas cortoplacistas?
"Higiene democrática"

Nota 2: (1 Ene 2016) La segunda pata del discurso de Susana, la anti-PP, la que permite que se maneje un planteamiento económico irreal, me preocupa.
No solo por lo que predice de mala gestión, que no es poco con la tasa de paro actual. Sino porque muestra una voluntad de fondo, una intención última a la hora de decidir el mensaje, de tipo tacticista.
Da la sensación de que el PSOE no tiene discurso que ofrecer. El PP se ha acercado al centro y el PSOE no sabe cómo diferenciarse.
Por ponerlo en imágenes. El PP ha reconocido el matrimonio homosexual mientras el PSOE no es capaz de salir del armario y mostrar sin tapujos su amor al libre mercado.