(30 sept 2017) El nacionalismo muestra que no cumple la ley.
La actual desobediencia abierta a la ley ¿puede rebotarles y ser el principio del fin de la permisividad?
Ojalá. Esa permisividad es lo que les ha permitido dominar emocionalmente a la sociedad. Imponer su relato emociológico, frentista.
(29 sept 2017) Nueva entrada en el blog
El problema de Cataluña es difícil porque no es un problema basado en cuestiones lógicas o prácticas. Esta basado en sentimientos.
Y la realidad es que no son emociones razonables. Son obsesivas y extremas, irracionales. Algo habitual en política, una constante en los populismos, nacionalismos y fanatismos religiosos. Y así deberíamos encuadrarlos.
Entonces se vuelve fácil: ¿Cómo hacer frente al nacionalismo obligatorio? -> evitando la permisividad.
Por eso es tan importante para los nacionalistas demostrar el 1-O que pueden saltarse la ley. Saben de sobra que es la base de su éxito.
Bienvenidos comentarios, críticas, sugerencias....
(29 sept 2017) ¿Cómo hacer frente al nacionalismo manipulador?
He visto hoy en twitter dos enlaces a artículos antiguos antiguos de Juan Claudio de Ramón:
La idea de España como valor Proponiendo propaganda positiva: Valor-vs-Nación, Tradición-vs-Identidad.
Un debate asimétrico Nacionalismo es manipulación -> hemos de 1-Desactivar mentiras, 2- Evitar sectarismo autodestruictivo entre quienes se oponen, 3-Unir ofreciendo valores superiores, 4- abochornar al manipulador evidenciando sus maneras de hacer.
Y me parece detectar cierta melancolía. Como si no fuese suficiente. Como si no fuese posible contrarrestar a la propaganda nacionalista.
Creo que es porque falta algo importante. Lo que resalto en Un nacionalismo consentido: La permisividad; es imprescindible evitarla.
El nacionalismo vive de una propaganda constante. En escuela, medios, administración... Y para desplegar esa propaganda necesita saltarse la ley. Este es su punto flaco: la propaganda constante es incompatible con la democracia, sólo es viable si hay una permisividad que la posibilite. El manipulador pierde su fuerza si no puede sumergir a la sociedad en propaganda constante, omnipresente, que impida pensar fríamente.
Intentaré resumir los puntos, ¿cómo hacer frente a los partidos políticos manipuladores, a las emociologías frentistas:
- Incorporar propaganda opuesta no emociológica, no frentista. Hay que cultivar emociones pero no de la misma manera (no con lo que denomino respuesta agresiva). Como sugiere Juan Claudio, utilizando patria como valor y no como símbolo separador. Y lo mismo identidad como tradiciones, algo dinámico y cultural, integrador, no estático y diferenciador.
- Desactivar mentiras (lo que yo llamo reestructuración cognitiva). Ahí, por ejemplo, se ve el peligro de las estrategias tipo "nación de naciones", que juegan a dar la razón poco a poco al manipulador (lo que denomino respuesta pasiva en Emociologías: Tipos de respuesta).
- Evitar sectarismo destructivo entre quienes se oponen al manipulador. No es buscar uniformidad, tan sólo no utilizar el tema nacionalista de forma distorsionada en la competición entre los partidos no nacionalistas. Esta faceta sectaria es la que describo en Deconstruyendo el nacionalismo, previniendo frente al filonacionalismo y el antinacionalismo.
- Unir ofreciendo valores superiores... esto es un tanto peculiar. Pero sí, conviene de vez en cuando recordar el valor de la democracia. De la real, no de fantasías buenistas ni exageraciones utópicas.
- Abochornar al manipulador evidenciando la mezquindad de sus maneras, dice Juan Claudio. Sí, también en buena cosa, aunque es más bien parte de lo que yo llamo conseguir un diagnóstico compartido (La faceta emocional del nacionalismo), que todos llamemos manipulación a lo que es manipulación.
- Evitar la permisividad. Por último, probablemente el más importante. No permitir al manipulador ocupar todo el espacio público. Esto aplica a Educación, Medios de comunicación públicos, Administración, Estado (ley de banderas...), Deporte (¿más que un club?)... Sin ese ambiente opresivo y monocolor, de propaganda constante, el manipulador no es nada. (esto ha sido obstruido tradicionalmente desde el filonacionalismo, así que convendría desactivar también las distorsiones en las que se basa, el famoso "fábrica de independentistas" que acompaña a todo intento de frenar la permisividad)
(28 sept 2017) Democracia 1-O Auto-de-terminación
Esto no va de pueblos ni de banderas, va de partidos
Democracia 1-O Auto-de-terminación
Pero no de fútbol, de los límites al poder de los partidos políticos.
(27 sept 2017) La defensa de la democracia
La democracia tiene que defenderse de muchas cosas. También de la manipulación emocional de masas. No hay que olvidar que el principal riesgo en las democracias reside en los partidos y los dirigentes, ya no en ejército, la iglesia...
Sólo hay que recordar a Chavez, Putin, Erdogan...
Así que, ahí van unas cuantas aplicaciones prácticas: Límite de mandatos, autodeterminación, democracia directa o multiculturalismo. Pero podría seguir, con la corrección política, los populismos....
El ejemplo más obvio hoy, la convocatoria de un referéndum ilegal en Cataluña.
El 1-O no va de pueblos oprimidos, sino de partidos políticos que han hecho tan fuertes, que presionan desde tantos entornos de la sociedad (medios de comunicación, equipos deportivos, empresas, colegios...), que ya no soportan las limitaciones de la democracia. Orgullosos claman que nada puede ponerse por encima de su capacidad de movilización social. Lo que en un intento de justificación denominan con el eufemismo: oponer legitimidad a legalidad.
Límitación de mandatos
Cuidado con supuestos derechos de de autodeterminación
Con fantasías aduladoras de democracia directa
De fantasías románticas multiculturalistas de pueblos y culturas oprimidas.
Es decir, la democracia debe defenderse en general de las emociologías.
(27 sept 2017) ¿Odio al PSC como tirita del PDECAT?
¿Por qué dice Puigdemont que no perdonará a los que no apoyaron?
No ha sido claro, pero ahí va una posibilidad (por algo suelo firmar brainstorming)
Quiere fomentar la fobia anti-PSC entre los nacionalistas. ¿Para poner la tirita porque teme una unión de izquierdas que les deje de lado?
(26 sept 2017) Escena tres (très évident): La democracia acosada.
Impagable la entrevista de Évole a Puigdemont
Puesto que esto va emociones, intentaré hacer más evidente su importancia con un símil: "La democracia acosada"
Escena 3: Ya en el centro del escenario, la pareja discute. Ella (Democracia) no acepta la proposición y él (Nacionalismo) la presiona saltándose el más elemental respeto mutuo (Constitución).
PDECAT: Es el único camino posible, ¡es que no se deja de otra forma!. Nuestro amor es sincero y todo será maravilloso, no lo puede rechazar.
ERC-CUP: Es criminal despojar al hombre su natural deseo de sexo. Jamás lo aceptaremos.
Podemos: Así no, pero... ¡será estrecha! Tarde o temprano lo aceptará. El sexo es el motor de la vida (el voto de la democracia) y nada debe poner límites al amor libre.
PSOE-PSC: Esto es inaceptable, el respeto es irrenunciable. Una vez dejado esto claro, creemos que ella le debería dar un beso para demostrarle que no está enfadada ni le desprecia. Y aceptar llevar falda corta como a el le gusta, si total da igual, lo haría por estética, no por sexo.
PP-Cs: Esto no tienen pase alguno, más vale dejarlo y llevar la conversación a otro terreno no sexual. Y cuanto antes mejor, no se aceptarán presiones irrespetuosas y estas cosas acaban mal.
P.S.: Otegi podría representar al violador condenado que acaba de salir de la cárcel, pasaba por allí y ya se sabe, estas cosas le gustan.
P.S.2: Muy de valorar no haya aparecido nadie que pretenda resolverlo, en ninguno de los dos sentidos, "con dos guantazos". Va a resultar que sí que tenemos una democracia avanzada.
Lo dicho, es básicamente un problema de inmadurez emocional. Y la chica está en su derecho de decir que no, que ni hoy ni nunca.
(25 sept 2017) Emociones en política: la hamburguesa emocional
Una frase que resume la idea anterior:
Emociones en política siempre ha de haber, pero no inmadurez emocional frentista o autodestructiva.
Posverdad, nacionalismos, populismos, buenismos... todos entran dentro de este cultivo de partidos y medios de comunicación de la hamburguesa emocional, del resultón tratamiento primario de las emociones.
(24 sepr 2017) Volando en círculos: es un problema de respeto, de madurez
Ayer leí un artículo de Savater en El País (Maníacos) en el que diferenciaba entre maniáticos, que todos lo somos, y maníacos: "maniáticos empeñados en imponer sus manías a los demás".
Hoy leo uno de Álvaro Oleart en Agenda Pública (Pensar el 2-O: la democracia no existe sin conflicto, pero no todo conflicto es democrático) una propuesta de diferenciar entre agonismo y antangonismo. El agonismo sería algo así como el antagonismo pero con respeto al contrincante, considerándolo rival en vez de enemigo.
En ambos casos creo que dan vueltas sobre el mismo problema (lo que llamo emociologías) y con en mismo objetivo: conseguir un juego con respeto mutuo.
Me gustan ambas diferenciaciones, maniáticos vs maníacos o agonismo vs antagonismo, pero creo que no se convence a un fanático con razones. Viven de la emoción más fuerte, tanto sea de odio como de idealización. Por ello nunca aceptarán ser limitado al agonismo ni reconocerán sus propias manías mientras puedan desmadrarse en el enfrentamiento.
El problema de fondo es que los discursos meramente emocionales calan en la sociedad. Es un hecho absolutamente comprobado que una sociedad puede estar compuesta de individuos maduros y sin embargo comportarse de forma inmadura como grupo. Y a estos discursos inmaduros no se les puede tratar como propuestas responsables (transacciones, diálogo…). El niño ve el dulce (el premio) como un refuerzo. Hay que reconocer su faceta emocional y aplicar respuesta específica.
Yo propongo:
– Consensuar el diagnóstico como emocional (¿respetan los nacionalistas a los no nacionalistas?)
– Caracterización de la manipulaciones concretas en juego (mapa emos)
– Respuesta asertiva, que ser irracional no proporcione beneficio.
Y cuando el manipulador inmaduro e irrespetuoso deje de serlo... bienvenido de nuevo a la transacción entre adultos racionales, con manías pero respetuosos y prudentes. Y cuidando las garantías, que en esta aparente tontería infantil nos jugamos mucho.
Espero que a Kiko Veneno no le importe que utilice para decorar la idea.
Está muy bien eso de las emociones en política. Y yo me comprometo. Pero no me des un dulce como a un niño, te estoy hablando de respeto.
Regaré tus flores si tu riegas las mías.
Kiko Veneno - Respeto
Un ejemplo de cómo se alimenta ese infantilismo emocional tan dañino. Tomado de El País de hoy mismo. Cualquier día es bueno para encontrar ejemplos.
La idea es: no soy independentista, ni 100% catalán, no me gustan los nacionalistas, a los que veo identitarios y carcas, ni el Estatuto. Pero me han ofendido y contendré la respiración hasta morir.
Esto, lo dice alguien como explicación para algo personal como dejar el trabajo, irse de casa o lo que sea y no hay una sola persona que no lo considere inmaduro.
Pues en política estas tonterías alimentan guerras.
(23 sept 2017) El nacionalismo es cuestión de emociones
Nueva entrada en el blog.
De acuerdo con esta entrada, la respuesta del Gobierno de España al incumplimiento de la legalidad por parte de la Generalidad de Cataluña creo que está siendo la adecuada (asertiva).
Y el precedente, dentro de lo malo, también también tiene facetas positivas. Muestra que existen los límites, que si alguien abusa del poder acaba siendo frenado. Algo que sin duda necesitaban los catalanes no nacionalistas (y quizá también los nacionalistas, para no perder el sentido de la realidad)
Mi felicitación, ya que el tema es importante a pesar de su apariencia festiva. Mal llevado acaba muy mal (sólo hay que recordar los asesinatos de ETA...)
P.D.: Ahora también en la página facebook de Emociologías: Facebook - Emociologias
(22 sept 2017) Nacionalismo ¿cuestión de emociones?
Se habla mucho de que el nacionalismo es difícil de tratar ya que es más una cuestión de emociones que de razones. Y lo comparto... en parte. Las emociones también se tratan.
El problema parece difícil ya que parece haber sólo dos tipos de respuesta. Alimentar emociones similares pero opuestas y vencer (digamos que la respuesta tipo Aznar) o aceptar su sinrazón e intentar apaciguar con concesiones (digamos que la respuesta tradicional)
Un terreno oscuro y desesperante en el que ninguna opción parece del todo buena.
Esto es así porque el enfoque no es correcto. No es práctico.
Afortunadamente, a día de hoy la ciencia no es la de principios del XX, hoy la psicología analiza y trata las emociones y tiene respuestas. Más o menos eficaces, todo sea dicho, pero mucho más prácticas que la mera reacción instintiva.
¿Dialogar y negociar? Por supuesto que sí. Pero sin concesiones a la fuerza. No hay por que regalar ni competencias ni privilegios. Esto es contraproducente frente a la manipulación emocional.
Y siempre acompañarlo de reestructuración cognitiva. Como el magnífico editorial de ayer de El País. Las distorsiones hay que desmontarlas, es parte fundamental ya que están en el origen de las emociones negativas.
También por eso son muy perjudiciales estrategias tipo "nación de naciones". Porque se reafirman sus distorsiones, se contagia uno de la enfermedad.
Por último, las prisas son malas consejeras en situaciones emocionales. No se pueden pedir respuestas rápidas, negociaciones que lo resuelvan de hoy para mañana. Lo que hay que pedir es respuestas asertivas y clarificadoras que poco a poco vayan ayudando a reconducir la situación.
Es decir, lo importante es disponer de un diagnóstico inicial del problema emocional a tratar
O mejor contado hoy en El Mundo:
E incluso contado por Tarradellas: "debido a determinadas propagandas tendenciosas y al espíritu engañador que también late en ellas... la demagogia y la exaltación de un nacionalismo exacerbado...utilizando un truco muy conocido y miy desacreditado, es decir, el de convertirse en el perseguido, en la víctima"
Y de un concepto claro acerca de los límites dentro de los cuales deben mantenerse las posibles respuestas. Qué riesgos hay de desarrollar respuestas contraproducentes.
(21 sept 2017) Adivina adivinancat - ficción optimista
¿Qué puede pasar el 1-O? Hala, aquí una de ficción optimista:
- La Generalidad admite que no puede convocar el referéndum y declara unilateralmente la independencia (signifique eso lo que signifique en la práctica)
- El Gobierno lamenta no poder aceptarlo e interviene la CC.AA. (signifique también lo que signifique)
- Desde la dirección de la Generalidad, el Gobierno se prepara la convocatoria de elecciones autonómicas en un plazo no muy largo.
- Se celebran elecciones, se cumplen más o menos las estimaciones actuales, y el secesionismo pierde la mayoría absoluta también en escaños. (encuesta Celeste-Tel)
- PSOE y Podemos gobiernan Cataluña con el apoyo de PP y Cs, que piden a cambio que se ponga fin a la deriva secesionista y a sus excesos más extremos. Sí a lo "social" (presupuesto...) pero a cambio de respeto a la legalidad en lo "nacionalista".
Y colorín colorado, queda encarrilado como en el País Vasco. PP y Cs contentos de que se resuelva, PSOE y Podemos contentos de llevarse la medalla. Y ERC había acabado pasándose, como en su día Mas, perdiendo por no frenar lo que ya parecía tener ganado.
Nota: porque quede claro, no pretendo que esto sea lo que va a ocurrir. Es sólo un poco de brainstorming, para abrir la mente.
(21 sept 2017) ¿Derecho de autodestrucción?
Es sencillo pero creo que toca recordarlo una vez más.
En democracia,los dirigentes (partidos políticos) deben tener un poder limitado. Por eso no existe ese supuesto derecho de autodeterminación, porque sería el derecho a segregarse del común quitándose de encima aquello que les limita su poder. Un derecho a la autodisolución del sistema, de autodestrucción.
Es una defensa frente a demagogos, populistas, élites locales... por eso las democracias no incorporan ese supuesto derecho. Que la demagogia sea inevitable no quiere decir que no se pueda disponer de protecciones frente a ella, todo lo contrario.
(20 sept 2017) Nación de naciones
Nos dice el PSC (vía PSOE) que aceptemos una nueva definición de España como nación de naciones. Nos tranquiliza explicando que no tendría implicaciones políticas, que sólo se refieren a la faceta cultural de nación. Y que servirá para mostrar una cara amable a los catalanes nacionalistas.
Vamos, lo que tradicionalmente se ha llamado una respuesta pasiva frente a un abusón: intentar agradarles. (Un nacionalismo consentido)
Entiendo que este será pronto el centro de la cuestión. Qué postura tomará la izquierda tras el 1-O, una vez los nacionalistas hayan perdido su apuesta.
La nación de naciones es ahí la opción filonacionalista: continuar validando la propaganda nacionalista. Seguir alimentado la bestia.
Un discurso que da la razón última a la propaganda nacionalista: el problema es que España es antipática y la solución ha de venir por que todos hagamos un esfuerzo por acercarnos al discurso que promociona la propaganda nacionalista.
Lo de siempre. La razón última de que el nacionalismo haya durado tantos años. Apoyo al sustento último del nacionalismo, a sus "emociones", a su propaganda.
(19 sept 2017) Nueva entrada en el blog
He retocado un poco el cartelillo de ayer... y creado una nueva entrada en el blog.
(18 sept 2017) Deconstruyendo el nacionalismo
En un nuevo cartelito de copiar y pegar...
(17 sept 2017) Un nacionalismo sin sentido y consentido
Nueva entrada en el blog:
Sobre un nacionalismo ya analizado como sin sentido:
(16 sept 2017) El abusón frente a la ley
Como contaba el pasado día 12, los partidos nacionalistas se han acostumbrado a mangonear en su zona. A incumplir las leyes que no les favorecen (educación, banderas...) y a arrinconar a quienes no les siguen. Como un hijo abusón al que los padres consienten durante demasiados años.
Ahora, sin estridencias pero sin cesiones, por sus propios excesos, se están viendo obligados a cumplir las reglas de la casa y respetar a sus hermanos, sí, también a esos tan desagradables que no les hacen la ola cuando pasan.
Es lo que tiene vivir en un estado de derecho y en un corralito nacionalista... afortunadamente. Manda la ley, no el más fuerte (mayoría) ni el más chillón (ideologizado)
Por jugar un poco con las palabras, no es aceptable una deriva del PDeCAT en Peronismo De CATaluña, de ERC en el ERdogan Catalán, ni de la CUP en Chavismo [e]UroPeo.
(15 sept 2017) El riesgo emociológico del 2-O
Imagino que entre los posibles escenarios tras el 1-O está el de unas nuevas elecciones en Cataluña que de lugar a un gobierno PSC-Podemos, con apoyo de Cs y PP a cambio de cierta estabilidad y moderación.
Es algo similar a lo que ocurrió en el País Vasco con Patxi López o con el fin de ETA. Rajoy regala a PSOE la imagen de ser quien resuelve los problemas a cambio de que no obstruya su resolución.
Todo es posible y suena a salida práctica. Pero tiene un riesgo: la izquierda volvería a sacar beneficio de la existencia del nacionalismo. Es decir, la emociología filonacionalista se vería premiada. Y no hay que olvidar que es una distorsión manipuladora más y que está en el origen del problema nacionalista desde la Transición (antes el nacionalismo bebía de otras aguas, primero tradicionalismo antiliberal y luego supremacismo racial)
Y sólo hay que ver a PSE tras Patxi. Así no se resuelve el problema, sencillamente se elige entre aguardiente o vino, pero no se deja de beber. Se arrincona la emociología más radical (secesionista) pero se mantiene una distorsión filonacionalista que sigue envenenando la sociedad y forzándola. El hermano abusón no manda solo, pero sigue abusando.
Una pena que Susana Díez no consiguiese redirigir el PSOE hacia una verdadera la solución, hacia un discurso saludable y constructivo.
(14 sep 2017) Firme, cuidadoso y templado
Hace ya mucho que comento lo de la triple pinza:
- El nacionalismo pega: saltándose los derechos de las minorías locales y las leyes. Adocrinando y uniformizando la sociedad con un objetivo político claro.
- El filonacionalismo maniata: impìde la respuesta minimizando el carácter opresivo del nacionalismo y sugiriendo, en contra de toda evidencia, que dejará de serlo tras alguna nueva cesión. Facilitando así la inversión victimista (presentar al manipulador como víctima).
La última novedad aquí es la plurinacionalidad, que viene a decir: démosles el término nación que ellos reclaman, que nosotros interpretamos sólo como algo cultural, sin transcendencia política (y que ellos interpretarán como derecho a soberanía, claro, como apoyo a sus presiones y a su discurso victimista)
- El antinacionalismo impide maniobrar: si el filonacionalismo bloquea las respuestas, el antinacionalismo penaliza cualquier respuesta que no sea el choque. Una estrategia de eficacia cuando menos cuestionable, ya que te vuelve predecible y se aplicaría en un entorno en el que no se tiene mayoría. Pero es que además tiene el mismo problema de fondo que las dos anteriores: es distorsionadora y manipuladora, convierte en enemigos a quienes no la compartan su línea de acción (traidores, cobardes... ya se sabe) y excita la diferenciación frentista.
Ese es el terreno en el que se juega esta partida del 1-O (y en la que se jugará la de después, con un PSC dominando al PSOE y queriendo ir de la mano de Podemos y con algo más de cercanía a nacionalistas que a PP).
Por eso conviene qie el gobierno sea firme y no ceda a las presiones nacionalistas.
Cuidadoso, para no ofrecer flancos a los filonacionalistas para invertir el discurso y transformar a quien agrede en víctima.
Templado, para no entrar en las provocaciones como un toro ataca la muleta.
Cuentan de una batalla medieval que se perdió por lanzar el ataque a galope desde demasiado lejos. Otras se pierden por perder los papeles.
Esta es aun una batalla democrática, en la que la evolución de la opinión pública es esencial. No creo que convenga entrar el el terreno de la alta emotividad como claramente pretenden los manipuladores emocionales.
Afortunadamente Rajoy parece que cumple el tipo. Y, no viene mal recordarlo, es a quien entre todos hemos elegido para liderar la respuesta a este envite. ¡Que no se nos vaya la pinza!
(12 sept 2017) Un nacionalismo narcisista, hiperactivo y manipulador, que busca desesperadamente atención
Una de las mejores características de la democracia es que la gente puede desentenderse del gobierno. Centrar su vida en el trabajo, ocio, relaciones... en lo que quiera, incluso en la política, con la confianza de que, mejor o peor, las cosas del Estado seguirán marchando sin demasiadas injerencias en su día a día.
Es algo así como una vida familiar sana, que te da cobijo sin marcarte la pauta. Sin padres autoritarios (dictadores) ni creencias obligadas (ideologías). Si algún miembro se apunta al Hare Krishna, se apunta él, no la familia. En tu cuarto puedes poner un póster de Star Treck pero no obligar a todos a hablar Klingon ni quitar los pósteres de los demás.
Así ha sido, afortunadamente, la vida política en España desde la Transición. Y quizá incluso desde algo antes, cuando el abuelo autoritario empezó a flojear.
Pero no lo ha sido por completo en todas partes. En las regiones con nacionalismo, los partidos políticos ha aplicado una presión obsesiva y constante sobre la sociedad, arrogándose el derecho a "normalizarla" a su gusto. El gobierno central ha sido tolerante y aséptico, ante todo no quería parecerse al abuelo, pero en algunos cuartos de la casa los hermanos mayores mangoneaban a su voluntad.
El Proceso que se ha arrancado ahora en Cataluña forma parte de ese cuadro. El nacionalismo es un hermano mayor abusón que se mira una y otra vez en el espejo (narcisista), que manda y manipula en su cuarto (adulando y estimulando a quien le sigue, arrinconando y ridiculizando a quien se opone), que necesita provocar constantemente al padre para justificar sus propias injerencias mediante el victimismo frente a la autoridad (hiperactivo)
Eso son nuestros nacionalismos. Un niño egocentrista, hiperactivo y manipulador al que se ha dejado hacer lo que no hubiésemos permitido al padre. Un niño al que no se puede dejar seguir saltándose las reglas (la respuesta sumisa no funciona con un manipulador), al que tampoco se puede responder con sus maneras (la respuesta agresiva pervierte a quien la practica) y frente a quien no cabe cegarse con deseos de que el sólo se corrija (el voluntarismo es sólo procrastinación).
Yo creo que el gobierno actual entiende bien el nacionalismo y sabe que la respuesta eficaz es la asertiva. No se entra al trapo de las provocaciones, no se responde con gritos a sus gritos, pero tampoco se premian sus desplantes... y así, poco a poco, se le va haciendo cumplir las reglas de convivencia, de democracia.
(10 sept 2017) Cataluña: España no es su problema sino su solución
Una sociedad se pierde cuando deja de importarle que la manejen con pasiones e ilusiones y da la espalda a la realidad.
Igual que Europa no era el problema de Grecia sino su solución. Su pertenencia a Europa impidió que se despeñase por una espiral de populismo, que cayese en las manos de Rusia...
La sociedad catalana ha permitido que sus políticos la embriagasen durante décadas con pasiones de comunión nacional, que la adulasen con fantasías de superioridad... y ahora paga las consecuencias. Una sociedad manejada sin respeto por sus políticos, a la que tanto le da Convergencia que CUP, seny que antisistema, legalidad que ideología.
Y en ese esquema España no ha sido protagonista, aunque por supuesto haya influido. Pero si es la tabla de salvación, quien está manteniendo el equilibrio y el sentido de la realidad.
El problema del día después de esa supuesta Cataluña independiente no sería el económico, que también, sino el político. ¿Quien pondría freno al Varoufakis de turno, al Hugo Chavez, al Pablo Iglesias, al Kitchner... que como vemos cada día ya lideran? Sin una España o Europa que la serenasen, dudo que Cataluña fuese capaz de no despeñarse, se ha acostumbrado al todo vale contra el enemigo, contra el vecino.
(10 sept 2017) El sostén actual del nacionalismo: los antinacionalistas
No lo desarrollaré mucho, ya que me lo he contado muchas veces. Por ejemplo:
Pero la última encuesta de intención de voto nos muestra claramente por qué cuesta tanto dar respuesta eficaz al nacionalismo.
El nacionalismo se ha nutrido de siempre de arrinconar al PP ("primero demonizaron a los del PP como franquistas, pero a mi no me importó..."), ahora cuentan con el valioso apoyo de quienes día tras día llaman al PP cobarde, traidor...
Hemos elegido un entrenador para este partido. Paradójicamente le llaman traidor quienes dedican todos sus esfuerzos a ir contra él.
Por aclararlo, una cosa es criticar la estrategia del gobierno u opinar en contra de Rajoy, y otra muy distinta desplegar y mantener una campaña de descalificación distorsionada y destructiva, como es el caso.
(8 sept 2017) Cataluña: jugar o trabajar, pasiones o resultados
Se oyen (principalmente desde medios de la derecha) bastantes voces que critican la labor del gobierno de Mariano Rajoy respecto del Proceso secesionista desarrollado por los partidos nacionalistas en Cataluña.
Algo que suele apelar a nuestros sentimientos pero que probablemente no valora la complejidad de sumar los apoyos necesarios para que la respuesta sea exitosa a medio plazo.
Deconstruyendo el nacionalismo
nacionalistas, filonacionalistas, secesionistas, antinacionalistas...
nacionalistas, filonacionalistas, secesionistas, antinacionalistas...
Una imagen que quizá ayude a entender la estrategia de Rajoy es la del juego del strip poker. Más que un choque de trenes o una competición de apuestas, lo que se está desarrollando en Cataluña es una confrontación que obliga a desnudarse a los contendientes. A mostrar sus verdaderas y últimas intenciones y disposición a tomar medidas correctas e incorrectas, mesuradas o alocadas.
Visto así, el nacionalismo está casi desnudo (incumple la ley, no respeta a sus minorías, adoctrina ideológicamente desde el Estado...) mientras el gobierno nacional apenas se ha quitado la chaqueta.
Así se está ganando la verdadera batalla. El apoyo internacional, la cooperación de partidos tradicionalmente filonacionalistas, la evolución la opinión pública en Cataluña y en toda España... Sin todo esto, no nos engañemos, las cosas podrían ir muy mal (véase el Brexit...)
(6 sept 2017) Derrota sin victoria (meditaciones)
Cuenta William Manchester en su biografía de Churchill (The Last Lion: Winston Spencer Churchill - vol1: Visions of Glory, 1874–1932) que Churchill vio mal cerrada la Primera Guerra Mundial. Tanto es así que a mediados de los años veinte ya comenzó a avisar de una segunda guerra. Algo que se hizo más patente tras la crisis del 29.
La idea básica es que en 1918 el ejército alemán no se sintió derrotado sino traicionado (y el cuchillo lo empuñaba un judío... o algo así dice un alto mando alemán). Y al poco tiempo percibe que un sentimiento une a los alemanes de extremo a extremo, el odio a Francia.
¿Quizá este es el motivo de que la Segunda Guerra Mundial se cerrase arrasando Alemania y Japón? Puede ser, aun no he leído los tomos 2 y 3 (aunque tengo ganas, esa biografía es una delicia)
El ejemplo me sirve para considerar dos posibles conclusiones. Una errónea y otra muy provechosa, a mi modo de ver:
1- Sin derrota total del oponente la guerra no resuelve nada (esta es, a mi modo de ver, la conclusión errónea)
2 - Mientras se alimente una emociología (eso es en el fondo la distinción entre judío/no judío o alemán/francés y alimentar rencores asociados) la guerra volverá.
Un planteamiento mata las moscas a cañonazos (muerto el perro se acabó la rabia) el otro atiende a la enfermedad específica que debe ser curada (habrá que prevenir emociologías)
Juguemos a aplicarlo al caso del nacionalismo.
El nacionalismo despliega una emociología claramente frentista
que se ve reforzada por el apoyo de la izquierda (apoyo interesado, como todo en política, por eso de arrinconar al PP)
lo que potencia el crecimiento de su versión radical, de la que se alimenta el grupo criminal (ETA)
Por teminar con el cuadro, con el tiempo también se va formando una oposición emociológica.
Tres presidentes intentaron acabar con ETA.
- Felipe Gónzalez fracasó porque quiso soplar y sorber a la vez (no se puede acabar con ETA mientras se alimenta el filonacionalismo).
- Aznar fracasó porque no consiguió el que el PSOE se alinease con él (no sirve de mucho ilegalizar si el contrario re-legaliza, no se puede arrinconar sin ser antes mayoritario)
- Zapatero fracasó porque no se puede ir de la mano del lobo, te muerde. Un grupo criminal con emociología frentista no suele cambiar a menos que le sea necesario; no cambia porque sí, por buenismo, y menos mientras lo utilizas para que muerda a tu adversario el PP.
Y uno lo ha conseguido, Rajoy. Al unir a "todos contra ETA" y sin concesiones a la ilegalidad. ETA es el nacionalismo criminal y el crimen ha desaparecido.
La historia parecería acabada, pero no. Por un lado el secesionismo sigue teniendo partido y un cierto mando en plaza. Por otro desde el anti-nacionalismo se considera que "ETA ha ganado", puesto que el anti-nacionalismo no es victorioso; que una derrota no total de ETA no es una derrota sino su victoria en la práctica.
Aquí es donde entra el ejemplo de la Primera Guerra Mundial. ¿Es precisa una derrota total? Eso sería una garantía pero quizá no es necesario.
Lo que sí se necesita es erradicar o controlar las emociologías frentistas. Si el odio se propaga, tarde o temprano aparecerán las armas.
(lo dejo así de momento, como una meditación, con el tema sin cerrar por completo... que toca trabajar)
(3 sept 2017) Democracia real
Ayer mantuve una agradable y sugerente (al menos para mí) charla con Saul Montes-Bradley (@Debradelai )
Pregunté su opinión acerca de:
Y su respuesta fue:
No hay tal dicotomía
La "campaña agresiva" es universal desde 1796 (vea Mencken)
PC, una novedad fascista (Demócrata) desde Wilson (Bernays)"
Lo que, si interpreté bien, significa que las dos cosas que opongo no son equivalentes. Que la democracia siempre implica una cierta manipulación emocional y un cierto "histrionismo".
Planteado de una manera más técnica y constructiva:
Sin embargo los excesos de lo políticamente correcto, se encuadrarían más en unas prácticas antidemocráticas:
Of his many books, Crystallizing Public Opinion (1923) and Propaganda (1928) gained special attention as early efforts to define and theorize the field of public relations. Citing works of writers such as Gustave Le Bon, Wilfred Trotter, Walter Lippmann, and his own double uncle Sigmund Freud, he described the masses as irrational and subject to herd instinct—and outlined how skilled practitioners could use crowd psychology and psychoanalysis to control them in desirable ways.
Deberé hacer las tareas propuestas y leer algo a Bryce y Bernays. Pero de momento no me parece algo muy ajeno a mi manera de pensar: en democracia la manipulación emocional está siempre presente, es parte del sistema, es humano; el peligro está en aquellas manipulaciones que se vuelven sistémicas, estables.
Por ejemplificar. El Brexit puede ser un desastre, pero es una chapuza típica de las democracias. El comunismo es otra cosa, convierte a los países en dictaduras.
(30 oct 2017) Lo extremo o lo sensato
Creo que no está de más recordar una realidad: lo extremo suena mucho y muy fuerte y se suele sobrevalorar. (no comparto llamar a nadie 'idiota', pero por lo demás la foto me gusta)
Quitando el ruido, pongo aquí cómo va la verdadera batalla en Cataluña. Y como con el paro, el déficit y demás... no va mal por mucho que muchos se quejen:
Un recuerdo: Rajoy es a quien hemos elegido como entrenador para este partido, muchos lo olvidan desde los medios y pretenden marcar ellos la única pauta aceptable a seguir. Pero es obvio que no va a haber cambio de entrenador antes del 1-O.
Apoyar al PP catalán es básico en este asunto.
(29 oct 2017) Secesionismo y asertividad
El concepto de emociología pretende incorporar el enfoque estrictamente emocional al análisis político.
Un ejemplo
El PP sigue una estrategia asertiva ante al reto secesionista, respaldada por:
- su voto
- Cs
- parte PSOE
- otros partidos y asociaciones
Y se encuentra en frente:
- nacionalistas y secesionistas
- medios de la derecha anti-Rajoy (Intereconomía...)
- izquierda filonacionalista
Las dos primeras claramente agresivas:
La tercera, pasiva-agresiva:
(27 oct 2017) ¿Multiculturislamismo? mejor, riámonos del Islam
¿Tiene la religión algo que ver con los atentados? parece obvio que sí cuando los terroristas atacan al grito de 'Alá es grande'.
Religiones e ideologías son potentes movilizadores sociales, lo que hace que precisen ser manejados con precaución.
El peligro principal está una faceta que yo denomino emociología: facilitan diferenciar entre grupos y enfrentarlos entre si.
Propagan discursos que separan entre creyentes/impíos, ricos/pobres, locales/extranjeros, pueblo/casta... favoreciendo la posterior formación de bloques donde se practica la intolerancia hacia el interior (machismo, uniformización...) y hacia el exterior (islamismo e islamofobia, nacionalismo y antinacionalismo, supremacismo y victimismo...)
Por este motivo, la democracia precisa que religiones e ideologías vayan acompañadas de tolerancia. Algo que, como todo, sólo se consigue con la práctica.
¿Es tolerante el cristianismo? Sí, después de siglos de tratamiento con constante irreverencia, haciendo un incuestionable en la sociedad que lo que es sagrado para el cristiano no tiene por qué serlo para el resto. El cristianismo es tolerante porque está acostumbrado a tener que serlo, está permanentemente entrenado en la tolerancia.
Como suele decir Savater: son las personas quienes merecen respeto, no las ideas. Pintar las puertas de una iglesia o una mezquita es acto reprobable, pero reírse de Dios o Alá en un periódico no lo es. Habrá bromas de mejor y peor gusto o tono, pero no es en sí una mala práctica. La desacralización protege a la sociedad de la potencial intolerancia que siempre acompaña a religiones e ideologías. Acostumbrarse a convivir con críticas hace mejores a las religiones.
Nada más peligroso con religiones, razas, ideologías, clases sociales, culturas... que lo se denomina multiculturalismo. Exagerar el respeto a las ideas erosiona el respeto a las personas. Y favorecer los grupos estancos es preparar el terreno para el enfrentamiento.
Como con todas las ideologías, los crímenes son cosa seria pero las ideas que hay detrás son muy a menudo risibles, ridículas.
La vida de Brian, Jesucristo superstar, Ocho apellidos vascos, Bananas, Dr Strangelove... son ¡pura salud!
Se echa en falta una buena "La vida de Mahoma" o un "Ocho apellidos musulmanes". Aunque sí, es probable se no sea sea sencillo, sólo hay que recordar la crisis de las caricaturas de Mahoma (Wikipedia: Caricaturas de Mahoma en el periódico Jyllands-Posten), es probable que por eso nos falten. Ahí es donde necesita ser capaz de mostrar nervio Occidente.
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